Concluyen su servicio militar más de 200 jóvenes del diferido
- Por Yanela Ruiz González
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Fotos: Elder Leyva
Hace poco más de un año llegaron llenos de expectativas y con la tensión ante lo nuevo. Incorporarse al servicio militar activo suponía en ese entonces adaptarse y comprender el lugar y el papel que les correspondía. A la vuelta de este tiempo sienten el crecimiento personal y la satisfacción del deber cumplido.
Así narra esta experiencia el joven Bruno Romero Ochoa, uno de los 239 soldados que, este jueves, fueron licenciados de las filas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, lo que se hizo efectivo en el acto realizado en un polígono de la Región Militar Holguín, con la presencia del Primer coronel Orlando Montero Ortiz, jefe de Defensa Antiaérea del Ejército Oriental, Coronel Delio Meléndez Batallán, jefe de preparación combativa en la Región Militar Holguín y una representación de oficiales, trabajadores civiles y familiares.
Muchas serán las experiencias que contar en lo adelante. Hablarán de las duras horas cuando se separaron, por primera vez, del ambiente del hogar para enfrentarse a una nueva rutina de saberes militares, de supervivencia y de tareas que debían cumplirse con exquisito rigor, porque así de recta es la vida en verdeolivo, pero también de cuanto agradecen el tránsito por esta etapa de preparación para enfrentarse a la vida.
Ahora se sientan más hombres y capaces de sobreponerse a las desafiantes dificultades en cualquier escenario, como expresó Rubén Ramiro Martínez López, quien junto a Héctor Fernández Jorge, Dionny Machado Gamboa y Dairon Peña Pérez fue condecorado con el Servicio Distinguido de las Fuerzas Armadas Revolucionarias por su actitud ejemplar y los resultados obtenidos en las tareas y misiones encomendadas.
Con orgullo los cuatro lucen la flamante medalla, algo que se refleja también en los rostros de las familias. Saben que detrás de todo el simbólico valor de la condecoración está el sacrificio y la disciplina de jóvenes ejemplares, los mismos que en septiembre próximo estarán sentados en las aulas de las universidades para continuar su formación profesional y convertirse en ciudadanos listos para la defensa de la Patria en cualquiera de los ámbitos que lo necesiten.
A ello se refirió Yaimara López Cortina, madre de Rubén, cuando frente a la formación de los jóvenes soldados expresó el reconocimiento, la admiración y el respeto por la actitud mantenida y les recordó cuánto el país los necesita para seguir avanzando y fortaleciéndose en el camino de construir una sociedad mejor.
